La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) tiene previsto publicar una nueva definición de la palabra "saludable" el próximo verano, según una declaración del comisario saliente Scott Gottlieb en un acto en el Pew Charitable Trusts de Washington D.C.
La definición actual de la FDA restringe el uso del término "saludable" en función de los niveles de grasa, grasa saturada, colesterol y algunos otros nutrientes, según la categoría a la que pertenezca el alimento. Esta definición se estableció en 1993 y sólo se ha revisado recientemente, a pesar de los cambios en las orientaciones dietéticas independientes.
Esto significa que alimentos como el salmón, los frutos secos, el agua embotellada e incluso algunas pastas sin gluten no pueden considerarse saludables, según la definición actual.
Tras años de interés por parte de las empresas alimentarias y los consumidores preocupados por la definición actual y obsoleta, la FDA solicitó en septiembre de 2016 la opinión del público sobre el término como reclamo para el etiquetado y la comercialización de alimentos. La agencia recibió tantas propuestas que se amplió el periodo de comentarios, que finalmente se cerró con un total de más de 1.100 comentarios públicos, que iban desde una mayor indulgencia hasta restricciones más estrictas sobre los OGM.
Junto con esta solicitud, la FDA emitió algunas orientaciones aclaratorias para servir mientras se analizaban los comentarios del público y se llegaba a un consenso sobre una nueva definición. En virtud de esta aclaración, se aligeró la restricción de grasa total siempre que la mayor parte de la grasa que contenga un alimento sea mono o poliinsaturada, si las cantidades de cada una se declaran en la etiqueta.
El interés de la agencia por cambiar la definición oficial se produjo en respuesta a una petición ciudadana enviada a la FDA por Kind después de que la empresa fuera advertida de que sus barritas contenían demasiada grasa para utilizar el término. Kind solicitó que el término "saludable" pudiera aplicarse a los alimentos si su contenido en grasa procedía de "frutas, verduras, frutos secos, semillas, legumbres, cereales integrales y marisco".
Gottlieb declaró que la definición exacta del término aún se está debatiendo en la FDA, pero que la agencia debería publicar la guía este verano. Según un asesor, el personal de la agencia todavía está revisando los comentarios recibidos sobre la definición.
Con el continuo crecimiento de las tendencias saludables, las empresas alimentarias siguen de cerca las nuevas directrices. Para aumentar el interés, la FDA está estudiando la posibilidad de introducir un nuevo icono para indicar a los consumidores que la agencia considera que el alimento es saludable.
Según Gottlieb, "una de las cosas que estamos contemplando dentro de la agencia ahora mismo es el propio icono. Hay una especie de debate riguroso sobre si incluimos o no el logotipo de la FDA en el... logotipo saludable".
Aunque no se sabe con exactitud qué cambios se introducirán en la definición, tanto las empresas alimentarias como los consumidores esperan con impaciencia la decisión final.